Es cierto que detrás de cada ser humano se esconde una historia,
pero no es menos cierto que a cada persona le acompañan otras muchas más historias, tantas cuantas dinosaurios encuentra en cada despertar...
Aunque
Lolita
colgó
cortinas por todas las paredes para amortiguar el sonido, no
consiguió jamás pasar desapercibida ni para su familia ni para el
vecindario. Fue un desencanto, fue una profunda insatisfacción tener
que renunciar al saxo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario