En
el puesto de trabajo nos vigilan mucho para que nadie deje de
producir ni un minuto. Se controlan con severidad los descansos, los
cafés, las idas y venidas a los lavabos. Pero ¡ay del que se
duerme! El jefe estalla en improperios y abre expediente por falta
muy grave, que puede acabar en una amonestación y pérdida de 60
días de sueldo. Precisamente esto es lo que me pasa a mí. Porque a
las tardes, despues de comer y con el madrugón que me pego, se me
cierran los ojos. Lo admito. Este mes he estado a punto de recibir mi
tercera sanción. La verdad es que esto de ser controlador aéreo
creo que no es lo mio. Lo estoy pensando.
______ o ______
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