5 dic 2016

Salvación garantizada

Antes era difícil llegar al cielo, porque si uno era rico tenía que pasar por el ojo de una aguja, algo a todas luces imposible. Y si era pobre tenía que evitar los pecados contra los bienes ajenos, los patronos o controlar eso de las bajas pasiones. Como sólo eran capaces de cumplir eso cuatro gatos, no más, tuvimos que rebajar las condiciones e inventamos la confesión.
Así que te venía un cristiano arrepentido de antemano diciendo que he pecado en esto y lo otro y prometo no volver a hacer lo otro y lo uno y, gracias a tu absolución, ya estaba limpio para cruzar la puerta que custodia San Pedro. Es así como hemos conservado a nuestros feligreses durante mucho tiempo, ¿me entendiste, novicio? Sí, santo padre.
____ o ____

No hay comentarios:

Publicar un comentario