29 jun 2022

El sambenito de Lali

Lali es una mujer con fama de casquivana. Eso he oído siempre en el pueblo. Hoy es el día en el que me toca atenderla en la residencia de ancianos y puedo hablar con ella. Es buena conversadora y tiene una cabeza ordenada a su 94 años. Seguro que habrás escuchado en este pueblo tenebroso y miserable, me dice mientras empujo la silla de ruedas, que he sido mujer ligera de cascos, ¿no? Bueno, le digo es que... Nada, tu abuela tenía la lengua muy larga y siempre que podía me ponía de vuelta y media, no digas que no. Bueno, no... Sé sincero, entre el cura y veinte beatas me pusieron a caldo de perejil durante muchos años. Y ¿sabes por qué? Es la leche, se queja. Fui la única chica del lugar que tuvo 4 novios, cuando lo normal era casarse con el primero con el que se salía. De ahí viene mi fama. ¿Por eso? Sí, por eso. Yo, que amén de media docena de novias ya voy por mi tercera pareja, sonrío. Y ella, que lo sabe porque tonta no es, añade. Elegí a la mejor persona que encontré en mi camino, a Conrado Santos, mi marido difunto que en gloria esté. Y no me arrepiento. Yo, que ya colecciono dos divorcios, le digo que la entiendo. Lali, usted fue valiente. Tú también, me dice. No en vano eres nieto de Pedrín, el Precipitado, mi primer novio. Me dejó sin palabras.

_______

No hay comentarios:

Publicar un comentario