Se me cayó un árbol encima y quedé atrapado sin poderme mover. Tardé 8 horas en ser liberado. ¡Cuánta amistad hice con un narciso que crecía en mis narices y cómo amenizó la espera un grillo cantarín que vivía a su sombra!
_________
Es cierto que detrás de cada ser humano se esconde una historia, pero no es menos cierto que a cada persona le acompañan otras muchas más historias, tantas cuantas dinosaurios encuentra en cada despertar...
¿Ves? Es lo que tiene andar talando árboles. Pero qué bueno lo del narciso creciendo en las narices.
ResponderEliminarY los dos sin mascarilla...
ResponderEliminar