El
viajero se acerca al andén, toma el tren cuando éste se detiene y
busca un asiento. Estira su chaleco con ademán elegante y adopta una
postura ausente, con la vista perdida en el horizonte.
La
viajera de enfrente le clava los ojos y al poco la pupila de ambos
quedan unidas por una mirada que congela la atmósfera del
compartimento.
A
él se le muda el rostro. Ella vacila desconcertada hasta que un
chasquido le rebota en el cerebro.
By V Fouche |
-¡El
tahúr! ¡El hijo de la gran puta que me dejó tirada! ¡Cabrón!
El
hasta entonces impasible viajero, escaso de argumentos ante el
sorpresivo ataque, pierde la compostura y hace lo que corresponde a
alguien de su catadura.
El
salto en plena marcha le sale regular.
Al
poco le vemos caminando por una senda desértica, con la ropa hecha
jirones y cojeando ostensiblemente.
-¡¡Joder,
ella trucó los dados!! -grita.
-¡Dados,
dados! -le contesta el eco.
Y
un grillo canta, como fondo musical de esta historia.
_____ o _____
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