La
primera gota de agua me cayó en la cabeza y me hizo daño, mucho
dolor. ¿Granizo? No, era una gota de agua muy densa, casi sólida.
Corrí a protegerme bajo un árbol. Errónea decisión. La segunda,
tercera y cuarta gota cumplieron ordenadamente su misión, así que
sucesivamente y en este orden, me desmayé, sufrí una perforación en
el cráneo y con la última abandoné definitivamente este mundo.
-Lo
siento, muchacho -me dijo-. De tanto estrés se me ha caído agua sin
control y las gotas me han salido de grueso calibre. Lo siento
-insistió.
____ o ____
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