Era un hombre que siempre soñó en una casita con chimenea encendida en invierno y un jardín con un árbol donde descansar a la sombra en verano, rodeado de niños que correteaban tras un perro. Pero él nunca dio el paso. Su madre le regañaba. ¿No encuentras una mujer de tu agrado? Eres demasiado exigente. Lo importante es que te quiera, recalcaba. No encuentro la mujer perfecta, se defendía. Eso solo existe en tu imaginación, tonto. ¿Acaso tú lo eres?
NOTA: Texto finalista en el concurso de febrero de Mundo Escritura.Tema: amor. Límite 80 palabras
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