26 feb 2021

El águila calva

Me cuenta el abuelo Simón que hace poco estuvo viendo una exposición de Lee Krasner, una mujer pionera en la pintura del llamado expresionismo abstracto norteamericano de principios del S. XX. Dicen, que alguien con nombre y apellidos y, por supuesto, buena intención, dijo de ella que su pintura era tan buena que nunca diría que lo hacía una mujer. Pues no se lo tomó como un piropo, me comenta mi interlocutor, tanto que ella misma lo contaba con sorna y pizca de decepción. Y como su amigo, el tío Machuca, ya empezaba a pasar de la disertación de su amigo, éste varió el guión. ¿Sabes qué te quiero contar? Obviamente dije que no. Me impresionó mucho el cuadro titulado "Águila calva". ¿Por qué? Mira, me enteré que esta mujer hizo una serie de dibujos en blanco y negro que colgó en las paredes de su estudio. Pero le acabaron disgustando y los rompió arrojándolos al suelo. Era mujer de ideas claras, ¿eh? Eso parece. Pues resulta que al cabo de unas semanas regresó al taller y se encontró con la inspiración. Miró los restos de su obra diseminados por el suelo y vio "algo". Tomó 12 cuadros presentados en una exposición anterior, aunque celebrados no vendidos, los hizo trizas y con los restos montó collages, uno de los cuales fue su famoso y celebrado cuadro de "El águila calva". Ya, enfaticé yo, dando a entender que entendía el proceso y el resultado. El tío Machuca, sin embargo, se mostraba incrédulo. Pero ¿se visiona en el lienzo un águila? ¡Qué va! Era un collage endiablado, pero te juro que anteriormente debió ser un águila calva, lo que pasa es que ahora los trozos estaban dispuestos en otro orden. Ya, dijo entonces su amigo. Y ¿volaba? Vete al carajo. Estamos hablando de pintura abstracta, no figurativa. Ya, ya, dijimos los dos. El abuelo Simón nos dirigió una mirada pelín airada y cerró el diálogo con una conclusión. Reconoceréis por lo menos que era una mujer con inspiración y arrestos, ¿no? Y méritos sobrados, añadí yo. Sí, sí, corroboró el tío Machuca sin titubear. Lee Krasner, recordó el abuelo Simón, era su nombre, no lo olvidéis.

________

No hay comentarios:

Publicar un comentario